Alfonso Lereté, director de la ANV, en diálogo con gesor dijo que uno de los desafíos para el quinquenio es alcanzar a los sectores de ingresos medios-bajos —aquellos que perciben entre 25 y 35 mil pesos— y que a menudo quedan fuera de los circuitos tradicionales de crédito. Lereté explicó la relevancia de la articulación con los gobiernos departamentales en la aplicación de políticas que den solución a las familias.
¿Se conocieron los números del presupuesto? ¿Qué perspectivas se le abren a la ANV?
-”Mire, con respecto al presupuesto que fuimos invitados por la Ministra de Vivienda, Tamara Paseiro, a la Comisión del Senado, Presupuesto y Hacienda Integrada, para participar como integrantes de la oposición, allí vimos, obviamente, el detalle de lo que iba a ser la inversión, tanto el Ministerio de Vivienda, también la dotación económica para MEVIR, el manejo que va a tener la Agencia Nacional de Vivienda, y los distintos productos que se van dando desde la perspectiva estatal para poder llegar a la población. En el caso de la ANV, que no es directamente la que entrega los préstamos, sí tiene algunos programas de refacción que actúan en la materia, se maneja como el gran brazo ejecutor que tiene el Ministerio de Vivienda hoy. Por tanto, en esa materia somos administradores, gestores, gerenciadores, tenemos una multiplicidad de tareas desarrolladas en todo el Uruguay.
Lo que sí estamos afinando, y esto lo hemos coordinado con el presidente Claudio Fernández y el vicepresidente Gustavo Machado, es la posibilidad de llegar a todas las sucursales en el interior del país para tener este diálogo. Primero con los funcionarios y después con las intendencias, que son nuestros principales socios. Porque manejan una cartera de tierra importante. Nosotros también, y a veces se dan determinados intercambios que favorecen a las dos partes. O por lo pronto, avanzar en los procesos vinculados con la escrituración, después de un largo tiempo de haber pagado la cuota, donde muchas personas dicen, cancelé mi hipoteca, tengo el derecho de tener el papel, que es el título de propiedad.
En definitiva, yo lo que le puedo decir también, y aprovecho la ocasión vinculada no con el presupuesto, sino con una ley muy importante, que es la Ley de Unidades Reajustables para los Deudores en Unidades Reajustables, que más de 15.000 familias fueron beneficiadas hasta el momento por la ley. Hay otras 5.000 a estudio, y en el caso de Soriano ya se acogieron a la misma tres familias que extinguieron el crédito, 107 le bajó la tasa de interés a 2,5 o 0%, y los que seguramente ahora en diciembre van a ingresar, son 7 que van a extinguir la deuda, 100 que le va a bajar la tasa. Esto es un número importante teniendo en cuenta la realidad de este departamento”.
Hay una demanda histórica importante de viviendas, y hay un grupo bastante importante de viviendas desocupadas, en la órbita pública y en la órbita privada.
- “Hay una normativa que está girando, por decirlo de alguna manera, y está a observancia del Parlamento en algunos asuntos, que en algunas localidades me parece bien. Por ejemplo en Montevideo, ese tema está presente de las viviendas vacías. En algún otro departamento del interior se ha dado también. A nosotros nos parece que igual hay que fijar una observación bastante detenida en algunos aspectos jurídicos, donde apareció la segunda biblioteca sobre este tema, donde hay que ponerle atención, simplemente atención.
Lo que sí está claro es que el sistema público de vivienda, como hoy se lo mencionaba, Ministerio de Vivienda, Agencia Nacional, Plan Avanzar, todos los brazos estatales que llegan hacia la población han podido avanzar, pero nos falta. Nos falta en ese ciudadano que tiene un ingreso entre 25, 30 y 35 mil pesos, donde muchas veces no logra justificar por su ingreso la capacidad del pago de una cuota. Por múltiples razones, pero es difícil llegar. Es complejo llegar, porque si bien la Ley de Vivienda Promovida, que ha sido muy buena, no está pensada para los salarios que le acabo de mencionar. Está pensada en otra dimensión y está muy bien, justo decir, porque allí llega una clase media uruguaya que necesita de esa vivienda y también se genera la dinamización de los desarrolladores inmobiliarios y de la industria de la construcción, y eso es positivo. Pero tenemos que llegar a esta franja de población que no puede tener como destino final un asentamiento, que no puede estar pensando en violentar la ley y decir yo ocupo, sino que desde el Estado tenemos que llegar. La Agencia Nacional puede ser un instrumento, pero también todo el resto del sistema público de vivienda”.
¿Eso va a implicar trabajar con las intendencias?
-”Las intendencias son fundamentales. Fundamentales porque tienen algo muy valioso, la cartera de tierra. Y además esa cartera de tierra que ya está clasificada, suelo urbano, suelo suburbano y suelo rural. Ya se sabe por los planes de ordenamiento territorial dónde se puede construir, en qué lugar se puede construir y además está el informe nacional vinculado con las zonas inundables. Hay lugares donde ya no se puede construir.
Le voy a contar simplemente algo muy puntual. En Santa Lucía, en Canelones, hay tierra del ANV que está muy cerca del río Santa Lucía. Ahí no podemos construir, pero ¿qué vamos a hacer con la Intendencia? Seguramente le demos ese predio para que pueda realizar allí un parque lineal, un espacio verde, un espacio de recreación. Y en ese ida y vuelta es donde nos fortalecemos institucionalmente. Porque si el ANV entrega un predio, va a recibir por parte de la intendencia otro lugar dentro de la cartera de tierra para poder construir o en coordinación también con el Ministerio de Vivienda. Por eso insisto que nuestros principales socios son las intendencias en el entendido de ese ida y vuelta que tiene que ser y es fundamental”.





